Koeman le ha relegado al banco y ha preferido tirar de Dembélé en los partidos decisivos de la temporada
(ABC) Tres suplencias consecutivas en el momento álgido de la temporada confirman el apagón de Griezmann en un equipo en el que nunca ha acabado de encajar y en el que aún no ha demostrado el rendimiento ni el nivel que se esperaba de él tras haber pagado 120 millones de euros al Atlético de Madrid por sus servicios. Delantero diferencial en el equipo madrileño y campeón del mundo con Francia, no ha lucido la vitola con la que llegó al Camp Nou y ha vivido inmerso en la polémica y la desconfianza durante el año y medio que lleva de azulgrana.