El español Alejandro Davidovich venció con autoridad a Novak Djokovic (6-3, 6-7, 6-1), número uno del mundo, en el Masters 1.000 de Montecarlo. El serbio, que no saltaba a las pistas desde el pasado 24 de febrero, cuando cayó en los cuartos de final del Torneo de Dubái contra el checo Vesely, se va del Principado a las primeras de cambio, ya que el duelo ante Davidovich significaba su debut en la tierra monegasca.
(ABC).- Los dos primeros sets siguieron una hoja de ruta similar. Davidovich tuvo una gran puesta en escena al comienzo del primero, donde llegó a ponerse 1-4, y en el segundo, en el que selló rápidamente el 0-3. Solo los destellos de Djokovic hicieron al español sudar la gota gorda, que incluso acabó por los suelos en varias jugadas, esfuerzos que dejaron algún que otro corte en la mano del malagueño.
El serbio se fue entonando y se llevó el segundo acto tras un apretado tie break (5-7), finiquitado con un último punto magnífico que puso en pie al público. En el tercer set, con un Djokovic más entero en lo técnico pero más tocado en lo físico, el andaluz volvió a la carga con un potente inicio, generando una brecha que finalmente fue insalvable para el balcánico.
Djokovic, tras su fallido desembarco en Montecarlo, continúa con su viacrucis particular desde que decidió no vacunarse contra el Covid, una postura que le ha impedido participar en varios de los grandes torneos de la temporada y que le ha lastrado en lo físico, alejado de su mejor forma por la inactividad. Algo que se evidenció durante el duelo ante Davidovich, donde tuvo algún que otro fallo impropio de un número uno. Incluso su entrenador, el croata Goran Ivanisevic, se mostró sorprendido con los erráticos golpes de su pupilo desde la grada.
Tras el mediático encierro de Djokovic en Australia, donde no pudo debutar en el primer Grand Slam por su negativa a la inmunización, el serbio no pudo viajar a la primera parte de la gira americana (Indian Wells, Miami, Acapulco) y espera renacer en la primavera, con varios torneos de altura, como Roma o Madrid, ciudades que han confirmado que sí acogerán al tenista.
Davidovich, número 46 del mundo, pasa a los dieciseisavos de final en Montecarlo, un torneo en el que ya tuvo una buena actuación la pasada campaña, en la que llegó a los cuartos y donde se enfrentó a Stefanos Tsitsipas. En el duelo contra el heleno, los problemas físicos le acecharon y se vio obligado a abandonar tras el primer set. Hoy, tras tumbar a todo un número uno del mundo, exige revancha.