MUNDIAL DE OREGON 2022
La reina de los Mundiales se retira con su 19ª medalla tras acabar tercera con el equipo estadounidense en el 4x400 mixto
Hay que ser sinceros. La última carrera mundialista de Allyson Félix resultó un desastre para Estados Unidos, relegada a la tercera posición después de dos postas especialmente malas de sus chicas. Sí, también de la laureadísima, más que nadie, campeona de Los Ángeles.
La fiesta de Félix, su homenaje, quedó empañado por la exhibición de la República Dominicana, que se llevó el oro en un espectacular final de Fiordaliza Cofil, que arrasó en la recta de meta a Kennedy Simón, que para más inri también se vio superada en los metros finales por la neerlandesa Femke Bol.
Antes, Allyson Félix, 36 años, también había sucumbido en su posta con Marileidy Paulino, aunque eso es mañas entendible, pues la dominicana es la actual subcampeona olímpica y la número uno del ranking mundial esta temporada.
El caso es que la decepción relativa que pudo tener Félix por el bronce le duró poco. Enseguida se envolvió en la bandera estadounidense y se dispuso a disfrutar de su despedida oficiosa del atletismo. La oficial y definitiva será al final de esta temporada.
Félix se retira con 19 medallas en Mundiales, más que ningún otro atleta en la historia, masculino o femenino. Al final, las resume así: 13 oros, 3 platas y 3 bronces.
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«Para mí terminar en casa significa completar un círculo. Durante mi carrera siempre tuve un poco de envidia de los deportistas que competían en casa», reflexionaba estos días la atleta antes de saltar al tartán por última vez. Félix, que suma también once medallas olímpicas, siete de oro, se marcha siendo considerada una de las grandes damas del atletismo: «Espero que se me recuerde como una feroz competidora, pero lo más importante para mí es tratar de dejar este deporte mejor de lo que lo encontré».
Aclamada desde las gradas del Hayward Field, la atleta iniciará ahora una nueva etapa, volcada en su familia y en especial en su hija Camryn, nacida en 2018. Por ella inició una batalla legal contra Nike, que le recortó hasta un 70 % de su sueldo tras quedarse embarazada. Su lucha obligó a la multinacional a cambiar su política respecto a las deportistas que interrumpían su carrera para ser madres.
«Fue un viaje increíble. He disfrutado mucho durante estos años. Este deporte me ha roto el corazón muchas veces pero también he tenido muchos momentos realmente felices. Lo voy a echar mucho de menos», concluye Félix. El atletismo se queda un poco huérfano.