Clattenburg, el colegiado británico de la final, reconoce que el tanto de Ramos «era una acción difícil y mi asistente falló»
(ABC) Mark Clattenburg, árbitro que dirigió en el estadio de San Siro de Milán la final de la Champions League en 2016, que disputaron el Real Madrid y el Atlético de Madrid y ganaron los blancos en los penaltis, ha confesado que el 1-0 fue en fuera de juego.
El británico reconoció en el 'Daily Mail' que el primer gol del encuentro, anotado por Sergio Ramos, no debió subir al marcador. «En esa final el Real Madrid se puso 1-0 en la primera parte pero el gol fue en fuera de juego por muy poco. Nos dimos cuenta en el descanso. Era una acción difícil y mi asistente falló».
Pepe, de los jugadores más complicados
La confesión del colegiado se produjo en una charla en la que recordó los jugadores más complicados a los que ha tenido que arbitrar, entre los que señaló al central madridista Pepe.
«Pepe hizo una falta sobre Torres. Estaba furioso y me dijo en perfecto inglés: 'Eso no es penalti nunca, Mark' Le dije: 'Vuestro primer gol no debería haber subido al marcador' y se calló. La gente pensará que es raro, porque dos errores no hacen un acierto. Los árbitros no pensamos así, pero los jugadores sí», explicó Clattenburg. «Sabía que si le decía eso aceptaría la situación. No era nada divertido arbitrar, tenías que estar vigilando constantemente. Es un jugador del que no puedes fiarte».