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Mié, Abr

La pandemia aumentó el número de pobres en Ecuador

Mundo
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El nivel de pobreza ha subido un 30%, y más de 620.000 ecuatorianos perdieron su trabajo a fecha del pasado septiembre

(ABC).-La crisis sanitaria ha sido una suerte de espejo que reflejó las desigualdades de una sociedad desigual que no siempre eran admitidas. La pandemia del coronavirus ha significado para Ecuador un grave deterioro de las condiciones de vida de su población, en especial de los más pobres, y un golpe demoledor a su frágil economía. 2020, que cerró con cuentas públicas en rojo, será registrado como el peor año de la historia económica del país.

Poner en orden la economía requiere que se controle la pandemia, pero también medidas que brinden confianza a los inversores que, por ahora, no lo tienen cuando el riesgo país es de mil 150 puntos. Exige igualmente reformas estructurales que solucionen los problemas que Ecuador acarrea desde antes. A punto de ir a las urnas, el 7 de febrero, esta tarea corresponderá a quien asuma el poder del 24 de mayo próximo, en reemplazo de Lenín Moreno, aunque algunas reformas las tendrá que hacer el actual gobierno, hasta abril, para recibir un nuevo desembolso por mil dólares del Fondo Monetario Internacional (FMI), -parte de un acuerdo por 6 mil 500 dólares firmado en agosto pasado- que exige bajar el déficit fiscal y ampliar la cobertura de protección social, considerando que la pobreza aumentará en 10 puntos porcentuales, en 2020, lo que equivale a unos 1,8 millones de personas (o 450 000 familias).

Parte de la década que gobernó Rafael Correa (2007-2017) el país tuvo los mayores ingresos por el alto costo del petróleo, pero, cuando se terminó la bonanza, se contrajeron onerosas deudas, en especial con la China; parte de ese dinero fue a grandes obras de infraestructura, contratas con sobreprecios. El déficit en el presupuesto estatal, en esos 10 años, superó los 30 mil millones de dólares. La deuda pública superó el 40% del PIB.

El nivel de pobreza crece un 30%

Las cifras que ha dejado la pandemia, hasta ahora, son demoledoras. El nivel de pobreza se incrementó en algo más del 30%, y el número de personas que perdieron el empleo, a septiembre de 2020, era de 620 mil ; todo esto implicó una contracción del 9%, algo nunca antes registrado en la historia nacional y que es mucho mayor que la crisis financiera de 1999, comenta, a ABC, Alberto Acosta Burneo, director de Análisis Semanal.

La situación es absolutamente crítica. El déficit que va a recibir el nuevo gobernante es de 6 mil millones de dólares (seis puntos del PIB), y una deuda pública que asciende a 63 mil millones de dólares. Moreno recibió en alrededor de 50.000 millones de dólares. El reputado analista económico Jaime Carrera, director del Observatorio de la Política Fiscal, dice que el endeudamiento es inmanejable, por lo que se impone un programa de sostenibilidad fiscal los próximos cuatro años 2021-2025 (el período del nuevo mandatario), con más ingresos y menos gastos. Y alentar la inversión privada con buen ambiente e impulsar las exportaciones.

Hacer estas tareas y llegar a las metas sí es probable, a criterio de Carrera, puesto que el país cuenta con cuatro pilares sobre los cuales podría sustentar la salida a la grave crisis económica. Se refiere a la dolarización, un sistema financiero sólido, la deuda que está reestructurada y el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI).

Sostener la dolarización, que rige desde 2000, es el mayor desafío económico. Es considerada tabla de salvación para los bolsillos de los ciudadanos, que no han perdido el poder adquisitivo como ocurría con el sucre (la anterior moneda local). Pero siempre está bajo amenaza, cuando caen las exportaciones y bajan la tributación, o por los anuncios de dinero electrónico para emitir dólares, que ha hecho uno de los candidatos, aunque todos los aspirantes a la presidencia coinciden en que hay que sostener la dolarización. «No hay que devolver a los políticos el poder de volver a emitir dinero para financiar gasto público. Se licúan los ahorros y se compra cada día menos», sentencia Acosta Burneo.