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Jue, Abr

«Ayudaremos a Ucrania a ganar hoy la guerra y mañana a reconstruirse»

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Estados Unidos crea un grupo de contacto para coordinar los envíos internacionales de armas a Kiev

(ABC).- Los servicios de inteligencia estadounidenses consideran que la guerra en Ucrania está entrando «en una fase resolutiva». «Las próximas semanas serán decisivas», dijo este martes el secretario de Estado de Defensa, Lloyd James Austin, en la base militar alemana de Ramstein, a la que había convocado a homólogos y altos mandos del ejército de 40 países aliados para coordinar el apoyo a Kiev y establecer las bases del futuro esquema de defensa de la región. Austin expresó su confianza en que Ucrania pueda detener definitivamente la invasión rusa. «Ucrania cree que puede ganar», dijo en el Club de Oficiales de la Base de la Fuerza Aérea estadounidense en Alemania, «y todos los aquí presentes creemos lo mismo».

 

Relaciona la lucha defensiva de Ucrania con dos batallas de la Segunda Guerra Mundial bien conocidas para los allí reunidos: la Batalla de Iwo Jima en el Pacífico, que duró 36 días, y la Batalla de las Ardenas, en el frente occidental de Europa, de 40 días de duración.

 

Recordó que los ucranianos han estado luchando durante 62 días y que «su resistencia es una inspiración para todo el mundo libre, que se mantiene unido detrás del Gobierno de Kiev». Esa presencia ha de materializarse en envíos de armas y hoy quedó organizado un órgano que se encargará de optimizar y coordinar las entregas de armamento, así como de aumentar la presión sobre las donaciones. «Moveremos cielo y tierra para satisfacer las necesidades de armamento de Ucrania», dijo, y anunció la creación de un grupo de contacto que se reunirá de forma mensual a tal efecto. «La reunión de hoy se prolongará en un grupo de contacto mensual», dijo, «que se propone encaminar la acción de las naciones de buena voluntad para intensificar los esfuerzos, coordinar la asistencia y concentrarse en la victoria de las batallas de hoy y los combates de mañana», refiriéndose a la reconstrucción del país.

 

La lista de la compra de Ucrania

La idea es que Ucrania presente su lista de la compra a este Grupo de Contacto y que éste se encargue de «fijar el marco» de las ayudas y rebuscar entre los arsenales occidentales las posibilidades de donación disponibles, «entender de manera conjunta las necesidades de Ucrania y coordinar la ayuda internacional con el fin de que los ucranianos puedan defenderse ellos mismos». La pregunta que quedó en el aire es quiénes formarán ese grupo de contacto y, muy especialmente, si China participará de alguna manera en ese esfuerzo internacional.

 

La invitación a esta «reunión del Grupo Consultivo de Defensa de Ucrania» en Alemania partió del Pentágono, que había convocado a numerosos socios, tanto miembros de la OTAN como ajenos a la Alianza, incluidos Finlandia, Israel y Japón. Algunos de ellos estaban conectados a través de videoconferencia. El JEMAD español participaba de forma presencial. También estaba presente el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, que confirmó por su parte que la invasión de Ucrania «ha entrado en una nueva fase», y contó que, hasta el momento, más de 30 países, junto con Estados Unidos, han anunciado ayudas a Ucrania por valor de más de 5.000 millones de dólares. Solamente Washington ha aprobado envíos de armas por 3.700 millones de dólares. El ministro de Defensa de Ucrania, Oleksiy Reznikov, fue recibido entre aplausos y recibió un fuerte abrazo de la ministra alemana de Defensa, Christine Lambrecht, que acababa de anunciar un giro en la política ucraniana de la 'coalición semáforo' de Olaf Scholz, que por fin se ha decidido a enviar armamento pesado.

 

Se trata sin duda de un paso importante, pero los foros atlantistas alemanes critican hoy las dimensiones del envío. El popular 'Bild Zeitung' criticaba que el envío de munición para los tanques «da para 20 minutos de combate». Pero a pesar de la lentitud y timidez de la reacción alemana, Austin utilizó un lenguaje comprensivo y ajeno a los reproches hacia el Gobierno de Berlín. «Alemania es un gran amigo y un importante socio», dijo el militar, que cumplió servicio precisamente en bases alemanas durante su juventud, «se trata de un buen anuncio, de un paso importante en el refuerzo de la capacidad de Ucrania, y lo que siga haciendo Alemania es una decisión soberana, me limito a decir que estamos seguros de que harán todo lo que puedan». Se refería a las dificultades de Alemania para hacer llegar armas a Ucrania y al mismo tiempo cumplir con el equipamiento propio que requiere su membresía de la OTAN. Para subrayar ese esfuerzo, el ministro alemán de Economía anunciaba hoy la disposición de su país de prescindir de las importaciones de petróleo ruso. «Hoy puedo decir que un embargo (de petróleo) se ha vuelto manejable para Alemania», afirmó durante una visita a Varsovia.

 

Amenaza nuclear

Todo esto sucedía mientras, desde Moscú, el ministro ruso de Exteriores Lavrov volvía a mencionar en voz alta la amenaza de una guerra nuclear, a la que Austin evitó referirse. «Naturalmente pueden pasar muchas cosas, pero la retórica de una guerra nuclear que nadie quiere y de la que todos saldrían perdedores no sirve para nada y no beneficia a nadie, no voy a entrar en esa especulación», respondió. Sobre las noticias que llegaban en tiempo real acerca de explosiones en la república separatista moldava de Transnistria, Austin se limitó a decir que «todavía no sabemos con certeza lo que está pasando allí, estamos analizando las causas y seguimos de cerca la situación», además de señalar que es importante evitar que la guerra de Ucrania «se desborde». «Con este fin», insistió, «es urgente que hagamos todo lo posible para reforzar la capacidad de defensa del ejército ucraniano».