Cuando los «cientos» de vehículos simpatizantes del presidente se adentraron en la urbe, se produjeron enfrentamientos con los manifestantes de «Black Lives Matter»
(ABC) Una persona ha fallecido la pasada noche en la ciudad de Portland en el estado Oregón en un enfrentamiento callejero entre un grupo de partidarios de Donald Trump y manifestantes en contra del racismo y la brutalidad policial. El fallecido, por arma de fuego, era integrante de un convoy de partidarios del presidente que había descendido armado sobre Portland tras más de tres meses encadenados de disturbios.
El convoy, saludado por Trump en redes sociales, se disponía a replegarse de una zona en el centro de la ciudad pasadas las 20.30 hora local cuando se oyeron disparos. Los vídeos e imágenes en redes sociales muestran a un hombre de raza blanca y atuendo de estilo militar acostado en el suelo mientras le atienden agentes de policía.
Un testigo dijo a la agencia Ap que el fallecido llevaba un gorro con el lema «Patriot Prayer», o «Rezo Patriota», un grupo de ultraderecha que ya se ha enfrentado en varias ocasiones a los manifestantes en Portland.
La policía de Portland dijo después que el hombre recibió un disparo en el pecho. No fue identificado de inmediato y no se sabe aún quién le disparó. La policía está investigando el caso. «Es importante que los detectives obtengan una imagen completa y precisa de lo que sucedió antes, durante y después del tiroteo», dijo en un comunicado la policía de Portland.
Esta ciudad de Oregon ha sido escenario de disturbios nocturnos durante más de tres meses, desde la muerte por asfixia del hombre de raza negra George Floyd en Minneapolis, cuando estaba bajo custodia policial. Tras los saqueos e incendios, cientos de manifestantes han sido arrestados por las autoridades locales y federales desde finales de mayo.
El jueves, en el discurso en el que aceptó la candidatura de su partido a la reelección, Trump describió Portland como una ciudad gobernada por la izquierda, sumida en el caos e incapaz de poner fin a esta larga ola violencia. Durante tres sábados, partidarios del presidente han descendido sobre la ciudad, armados y en convoyes, en señal de protesta contra los disturbios y la protesta.
La caravana se había reunido más temprano ese día en un centro comercial en las afueras y avanzó hasta el centro de la ciudad. Los manifestantes contra el racismo, atrincherados allí, cortaron puentes, alzaron barricadas y les cerraron el paso. Hubo momentos de tensión, y alguna pelea aislada, hasta que el convoy comenzó a replegarse. Entonces se oyeron los disparos y murió la víctima.