Por medio de este comunicado nos dirigimos a los pueblos de la sierra, a la opinión publica y a las instituciones que nos dejaron al abandono y a la voluntad de Dios.Como ya es de el conocimiento publico, en la sierra de Guerrero se esta librando una gran batalla entre la gente los pueblos de la sierra en contra del llamado cartel del sur.
Mucho se ha dicho y se ha opinando de este conflicto, pero como dice el dicho: "sólo el indio sabe lo que trae en el morral". Ya casi dos años han pasado desde que este grupo criminal, afincado en en el municipio de Leonardo Bravo y Eduardo Nery, se han dedicado a asaltar a la gente y a los comerciantes, y a robarles sus mercancías; a levantar a hombres y mujeres, a violar a las muchachas, a golpear a los transeúntes y en el peor de los casos; los asesinan como si fueran ganado y los desaparecen. Durante meses hemos vivido el acoso, el despojo, la desaparición y la muerte de nuestros seres queridos. Ante ellos hemos hecho el llamado de una y de tantas maneras al gobernador Hector Astudillo, a que atienda y resuelva este conflicto, sin embargo, no hemos logrado ninguna respuesta que satisfaga nuestras demandas; por ello y ante el abandono de quienes tienen la obligación de castigar e impartir justicia, nos hemos hemos visto en la penosa necesidad de ponerle fin a esta situación, la cual, ya es insostenible; pues, ante las lágrimas de nuestras mujeres y niños al perder a nuestros seres amados; en un arrojó de rabia, desesperación y dolor, hemos tomado con determinación, salir a morir o a matar a quienes ultrajan y matan a nuestras mujeres y niños. No podemos seguir viendo como ellos lloran y sufren, y quedarnos con los brazos cruzados. Si vamos a dejar huérfanos a nuestros hijos y viudas a nuestas mujeres, que sepan que morimos peleando por ellos, para que ellos tengan derecho a estudiar, a recibir atención medica y una mejor calidad de vida; que puedan transitar por los pueblos y podamos vivir tranquilos de saber que irán y regresaran con bien y que no serán asesinados y desaparecidos.
Esta lucha no es contra los pueblos; es a favor de los pueblos. ¡No es por intereses personales, no es por plazas, no es por el control del acaparamiento de la amapola y su trasiego, como justifican los medios y el gobierno; es por justicia, por libertad, por el derecho a la vida, y por sobre todo; por amor a nuestra gente... a nuestra tierra!
Aprovechamos, además, para responsabilizar a las instituciones y al gobierno por el tan injusto abandono en el que nos han dejado, pues si no fuera por eso, este conflicto no tendría razón de ser. Entiéndase que lo que sucede aquí en la sierra también debe quedar en la conciencia de quienes nos gobiernan pero no nos representan; tanto tiempo minimizando el problema y mientras tanto nuestros hijos no van a la escuela, no tenemos medicinas y doctores en los centros de salud, no tenemos abasto en la tiendas, no tenemos transporte...
A los pobladores de los pueblos donde operan estos individuos, les pedimos paciencia y comprensión por todo los inconvenientes que este conflicto ocasionan; esta lucha también es por ustedes, pues, muchos de ustedes son nuestros parientes y amigos; sabemos que también sufren la opresión que infringen contra ustedes y sus mujeres al obligarles a manifestarse para pedir ayuda al gobierno a favor del cartel del sur; sabemos que obligan a los hombres a armarse y a defenderlos y quien no acepta es despojado de sus pocos bienes y son expulsados de sus pueblos o asesinados. Esto ya muy pronto se va a terminar.
Ante todo lo anterior hemos tomado medidas drásticas, pues el gobierno y los acosos de este grupo criminal no nos dejaron otra alternativa; o vivimos o morimos, pero sera peleando por la sagrada responsabilidad que tenemos para con nuestras mujeres, ancianos y niños, y el respeto a sus derechos mas elementales.
¡Si no hay respeto a la vida de los pueblos de la sierra, que no halla paz para el cartel del sur!
ATTE: los pueblos de la sierra!