Cada día lluvioso, se escucha sobre el causa del río, niños jugando a altas horas de la madrugada en medio de una oscuridad espantosa
Acapulco Gro., 17 de junio del 2021(Noticias Acapulco al Desnudo.com) La colonia La Joya, localizada en la Frente del Diablo, en la zona poniente del municipio es lugar de los CHANEQUES, cayendo la lluvia sobre el cause del río, se escucha a todo lo largo y ancho las carcajadas de pequeños seres semejantes a niños, en medio de una oscuridad espantosa.
Son las tres de la madrugada, se me espantó el sueño, al escuchar a decenas de niños jugar en los escurrimientos del río en la colonia La Joya. A los vecinos ya no les causa extrañeza que niños jueguen a esa hora en medio de una oscuridad porque ya se acostumbraron a eso. En mi caso, no pude dormir, era mucho el escándalo de esos pequeños seres diminutos que no cesan de jugar en medio de la nada.
Cualquiera que tenga dudas, puede darse una vuelta pasando las 12 de la noche, entrando por la llamada Frente del Diablo, la famosa curva que está antes de llegar a la colonia Jardín Palmas. Entrando luego de la curva está el arroyo, río arriba bajo la sombra de un enorme árbol de mango está una pequeña cascada natural formada de piedras en relieve por donde se escuchan esos pequeños seres que no dejan dormir en tiempo de lluvias.
Aunque parezca extraño, este fenómeno paranormal, se presenta en esa colonia que se encuentra en medio de dos cerros. En la zona hay al menos dos familias que practican el espiritismo, pues a plena luz del día, se escuchan a pocos pasos del río, el sacrificio de las gallinas negras y en algunos casos chivos.
Hoy cayó un aguacero, seña de que no podré dormir. Esos pequeños seres estarán muy activos jugando en medio de la sombra de la noche. Sus carcajadas se escuchan a un kilómetro cerro arriba. Sobre la colina la gente, no se inmuta, son los “duendes”, dice una señora, que afirma que jugaba con ellos, cuando era niña.
Mañana será otro día. No sabremos hasta que deje de llover, cuando esos extraños ruidos de niños dejarán de escucharse. Amén de que aunque para muchos es normal, para mí no lo es. Pues me espantan el sueño.