En solo un mes, lo que parecía imposible se ha hecho realidad
(ABC).- Tras año y medio sin fútbol, la pelota volverá por fin a rodar en el Santiago Bernabéu. Emocionante para los 22.500 madridistas que puedan acudir in situ al coliseo blanco, pero también para los millones de hinchas merengues que lo podrán ver desde su casa. Nadie lo resume mejor que Florentino: «El 1 de marzo de 2020 fue la última vez que pudimos estar juntos en el Bernabéu y es emocionante decir que el fútbol regresa ahora al Santiago Bernabéu, después de momentos tan duros y extraños », dijo el pasado miércoles durante la presentación de Camavinga.
Será un Santiago Bernabéu, aún a medio hacer, distinto a lo conocido, con una cubierta casi terminada, sin sus clásicas torres, sin apenas aficionados en el primer anillo debido a las obras, y con caminos poco habituales a los conocidos para dar con la butaca de turno. Cambios todos ellos con el objetivo de que en el otoño del próximo año el Real Madrid pueda presumir del mejor estadio del mundo.
Cambios que muchos, sobre todo los antimadridistas, no veían posible que permitieran al coliseo blanco albergar partidos desde septiembre, teniendo en cuenta cómo estaban las obras hace apenas un mes, con todo el estadio patas arriba. Pero el buen trabajo de los cientos de profesionales, como se puede ver en las fotografías de 'Nuevo Estadio Bernabéu', que cada día se dedican a poner 'guapo' el Bernabéu ha hecho posible el milagro en un último mes frenético de avances.